La Norma de Información Financiera (NIF) C-4 es un documento que establece las normas de valuación, presentación y revelación para el reconocimiento inicial y posterior de los inventarios en el balance general de una entidad económica. En este blog repasaremos los conceptos básicos para entender el manejo correcto de los inventarios.
Sistemas de valuación de los inventarios
En la teoría de costos existen 2 sistemas de valuación de inventarios: costeo absorbente y costeo directo o variable. El directo contempla solo los costos variables de fabricación que varían en relación con los volúmenes producidos; es decir, los costos fijos no se consideran. Por otro lado, el costeo absorbente incluye los variables y un prorrateo de los costos fijos.
En este sentido, la NIF C-4 consideró que el costo de producción debe incluir todos los costos y gastos, eliminando así el sistema directo o variable contemplado en boletín C-4 de los antiguos principios de contabilidad generalmente aceptados (PCGA). Este cambio se hizo para estar más adecuados a la Norma Internacional de Contabilidad (NIC) o IFRS por sus siglas en inglés, específicamente la NIC 2 de Inventarios.
Los inventarios deben valuarse a su costo o a su valor neto de realización, el menor. El costo puede ser el de adquisición o el de producción. Los inventarios pueden sufrir pérdidas por deterioro, lo que ocasiona que su valuación dependa del valor neto de realización, es decir, del precio de venta pactado menos los costos por terminación y/o disposición.
Los costos por disposición pueden incluir comisiones, almacenaje, surtido, fletes, acarreos, seguros, etc. Los de costos terminación son en los que puede incurrirse para concluir con la fabricación para su “realización” o venta.
Costo de producción
El costo de producción (de fabricación o de transformación) representa el importe de los distintos elementos del costo que se originan para dejar un artículo disponible para su venta o para ser usado en un posterior proceso de fabricación.
Estos se integran por los siguientes tres elementos:
Materia prima y/o materiales directos. - materia prima son los costos de su compra y los gastos adicionales para colocarlos en el sitio de fabricación (fletes, gastos aduanales, impuestos de importación, seguros, etc.). Materiales directos son los envases o empaques de mercancías y refacciones para mantenimiento.
Mano de obra directa. - el importe incurrido por el trabajo (incluyendo seguridad social patronal) utilizado en la producción de las mercancías.
Gastos indirectos de producción. - estos pueden ser fijos o variables.
Los gastos indirectos fijos de producción son aquéllos que permanecen relativamente constantes, independientemente del volumen de producción, tales como la depreciación o arrendamiento, el mantenimiento de los edificios en los que se ubican la maquinaria y equipo de producción y los costos de administración de la planta.
Los gastos indirectos variables de producción son aquéllos que varían en proporción con el volumen de producción tales como los materiales indirectos y la mano de obra indirecta.
No existe una metodología única para determinar el costo de producción. Cada empresa debe determinar sus bases, sin embargo, no deben tomarse como costo las situaciones anormales de producción. Por ejemplo, desperdicios por ajustes de maquinaria en procesos iniciales o mano de obra en fase de pruebas.
Rubros de inventarios
Durante el proceso de producción deben identificarse y cuantificarse las porciones de inventarios que están en cada etapa del proceso. De esta manera surge la siguiente clasificación del inventario:
Materias primas y materiales. - bienes de consumo que se transformarán en componentes o productos terminados.
Producción en proceso. - bienes de consumo que ya están en transformación pero que debido a un cierre contable deben de cuantificarse aún cuando no están terminados.
Artículos terminados. - aquellos productos destinados para su venta. En el caso de industria son los que han concluido su proceso de fabricación y en el comercio son aquellos que se adquirieron para su venta.
Artículos en consignación y/o demostración. – son artículos entregados a terceros para su demostración o venta pero que siguen siendo parte de los inventarios, toda vez que sus riesgos o beneficios aún no se han transferido.
Mercancías en tránsito. – son bienes que aún no están en propiedad o planta de la empresa, pero que el proveedor ya ha transferido los riesgos y beneficios de estos.
Refacciones, suministros y herramientas. - son insumos que se mantienen almacenados y que se destinarán a la producción. Si no cumplen con la definición de inventarios, deben tratarse como Propiedades, planta y equipo.
Los principios de contabilidad (PCGA) anteriormente contemplaban los anticipos a proveedores como parte de los inventarios, sin embargo, la NIF C-4 ya no los considera parte de la cuenta de inventarios.
Métodos de valuación de los inventarios
Son un conjunto de procedimientos que se utilizan para valuar los inventarios y pueden ser:
Costo de adquisición. - es el importe pagado de efectivo o equivalentes por un activo o servicio al momento de su adquisición.
Costo estándar. - determina anticipadamente y en esta determinación se toman en consideración los niveles normales de utilización de materia prima, materiales, mano de obra y gastos de fabricación y la eficiencia y la utilización de la capacidad de producción instalada. Las cuotas de costo estándar se revisan periódicamente, y deben ajustarse a la luz de las circunstancias actuales.
Costo detallista. - El importe de los inventarios y el costo de ventas se determinan valuando los artículos en inventario a su precio de venta menos un porcentaje apropiado de utilidad bruta. Se utiliza en entidades que tienen grandes cantidades de artículos con márgenes de utilidad bruta semejantes y con una alta rotación, que hacen impráctico utilizar otro método; por ejemplo, supermercados y tiendas departamentales.
En el siguiente blog analizaremos el último concepto básico de los inventarios: las fórmulas (antes métodos) de costeo y su importancia para la determinación de la base gravable del impuesto sobre la renta de personas morales.